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El software social, el análisis de redes y el social networking: Separando el grano de la paja
Una conversación entre Mariángela Petrizzo Páez e Isidro Maya Jariego
El análisis de redes sociales cuenta con una larga tradición de investigación en las ciencias sociales. Las “redes sociales” online son un boom reciente entre las aplicaciones de Internet. El interés por las redes online ha llevado a muchos periodistas a buscar información entre quienes se dedican al análisis de redes sociales. Y entre estos últimos se ha generalizado cierta preocupación por el uso poco informado del término. Esta conversación se inició como una entrevista de un medio de comunicación mexicano a dos investigadores interesados en el análisis de redes. Y continuó a través del intercambio de mensajes electrónicos entre Venezuela y España. Hemos mantenido las preguntas originales que suscitaron el intercambio.
Mariángela Petrizzo Páez (MAPP) es politóloga miembro de ENDOLOGICA y Gerente General de SPIRALIA. Isidro Maya Jariego (IMJ) es profesor de psicología social, dirige la Revista REDES y coordina el Laboratorio de Redes Personales y Comunidades.
El Software Social y las relaciones interpersonales
¿Qué es el “Software Social”?
MAPP: Aunque comúnmente entendemos por software social las aplicaciones de búsqueda y contacto de amigos que conocemos (Facebook, Hi5 y otras), en realidad tiene que ver con cualquier aplicación o idea -no exclusivamente tecnológica o informática- que tenga por objetivo facilitar el fomento, la construcción y la modificación de las relaciones entre los individuos, es decir las interacciones y los vínculos sociales.
IMJ: Y a la inversa, también son aquellas aplicaciones que se valen de las relaciones sociales para potenciar sus fines y contenidos. Por ejemplo, un periódico que genera una iniciativa de periodismo comunitario con sus lectores, facilitando que compartan fotos personales sobre un acontecimiento. O una universidad que mejora sus procesos de transferencia tecnológica poniendo en marcha servicios en una Intranet que comunican a los grupos universitarios de investigación con los profesionales que actúan directamente en el mercado o en la comunidad.
¿Usamos de modo distinto las plataformas de Networking porque vivimos en lugares distintos? ¿Hay diferencias entre Europa y Latinoamérica?
IMJ: Hay una distribución desigual en el uso de las aplicaciones de software social lo cual permite identificar la conformación de diferentes subculturas regionales. Por ejemplo, entre las herramientas de networking Orkut destaca por su expansión en Brasil y en la India, Facebook está muy extendido en Canadá y en Gran Bretaña, y MySpace cuenta con muchos seguidores en México o Venezuela.
Muchas de estas aplicaciones se difunden a través de la invitación de amigos y de contactos previos, lo cual puede servir para explicar, en buena medida, esta distribución del uso de estas herramientas: se generan cadenas de familiares, amigos y conocidos que, a su vez, facilitan la difusión de las diferentes herramientas existentes. Cuando se alcanza una masa crítica de usuarios, el uso de una plataforma específica se convierte en norma y se acaba consolidando un conglomerado de relaciones.
En el caso particular de España y Latinoamérica, el idioma español podría estar condicionando el uso privilegiado de unas plataformas sobre otras. Por eso hay herramientas, como Facebook, que han decidido ofrecer una versión en castellano, buscando facilitar el acceso a aquellos usuarios que no dominen el inglés. Lógicamente, estas decisiones afectan a la conformación y la naturaleza de las comunidades virtuales a través del uso de estas plataformas e, incluso, se revierten en posicionamiento variable de sus patrones de uso, quizás mostrando discontinuidades en su auge. Por ejemplo, ahora Facebook está comparativamente poco extendido en España y Latinoamérica, pero en la medida en la que se vaya difundiendo y acumulando usuarios de habla hispana se puede revertir la situación.
MAPP: Para el 2008, el Global Information Technology Report 2007-2008, preparado por el Foro Mundial, identificó tres elementos para la medición del Índice de Acceso a la Red (Network Readiness Index por sus siglas en inglés): variables del entorno (como infraestructura y políticas de telecomunicaciones por ejemplo), medidas de acceso (como el acceso individual, gubernamental y comercial a servicios de red) y medidas de uso de la red (como número de suscriptores individuales y comerciales o número de empresas de telecomunicaciones). Según ese índice, ningún país de América Latina se encuentra entre los cincuenta primeros países de los cien evaluados. El mejor puntuado de Latinoamérica es México, en el puesto 58, seguido de Brasil y Costa Rica. Otros países de la región como Colombia y Argentina figuran antes del puesto 80 es decir entre los últimos treinta países analizados, pese a que en la región, realizan importantes contribuciones en producción de software.
Si evaluamos el uso de plataformas de networking, en Latinoamérica, tal parece que las preferencias en uso de los sitios de internet se decantan hacia la búsqueda de sitios para redes sociales, lectura o mantenimiento de blogs. Parece que la preferencia en Latinoamérica es a utilizar lugares como Hi5 y MySpace, y en segundo lugar, Facebook y Orkut, en franco crecimiento de
usuarios. Tal parece que este patrón en el uso tiene relación con el hecho de que Hi5 y MySpace son sitios vinculados a la compañía que inicialmente ofrecía, hace unos diez años, el mayor servicio de correo electrónico gratuito para un momento en el que se comenzaban a experimentar en ese continente el incremento de flujos migratorios hacia Europa y Estados Unidos, y en el que las telecomunicaciones en Latinoamérica comenzaban a expandir sus horizontes hacia la diversificación de servicios privados de proveedores de internet.
¿Qué hay de redes sociales en los sitios de networking y qué hay de networking en las redes sociales?
IMJ: Creo que ambos conceptos se vinculan parcialmente en los sitios de networking. Muchas de estas iniciativas se inspiran en la idea de los “seis grados de distancia” de Milgram, la cual sugiere que todos estamos conectados por una densa malla de relaciones y que esto posibilita que entre dos personas desconocidas haya, en promedio, hasta seis personas de distancia. Sin embargo, a veces se presume que la acumulación de contactos tiene algún sentido en sí misma o que la confianza en las relaciones personales funciona con independencia de cual sea la longitud de una cadena de conocidos. Y eso normalmente no es así.
Por otro lado, con frecuencia se suelen identificar las plataformas de redes sociales con el proceso de análisis y conformación de redes sociales, lo cual no es correcto. En cualquier caso, estas plataformas son un fenómeno que ilustra la interesante ebullición de aplicaciones para gestión de contactos y está dando lugar a otros fenómenos novedosos en las relaciones personales, como por ejemplo el reemplazo de algunos medios tradicionales para la comunicación a distancia como el teléfono o la correspondencia, pues estos medios han demostrado ser muy útiles para el mantenimiento de contactos a larga distancia o para establecer nuevas relaciones.
Es importante acotar que una de las carencias más marcadas observadas en las plataformas de networking, es su omisión del uso social que se hace de las mismas. Pongamos por caso la fusión de bases de datos de contactos profesionales. Hace algún tiempo Xing adquirió Econozco y hace unos meses atrás hizo lo mismo con Neurona. En ambos casos se ha presentado como una “suma” de redes de profesionales, que amplía las oportunidades de los usuarios de ambas. Sin embargo, en las redes sociales y en las relaciones personales la única cuestión no es sumar o, como diría Durkheim, el todo siempre resulta ser más que la suma de sus partes. Hay que atender a la estructura y a la naturaleza de las relaciones porque allí radica un peso importante de los patrones de uso de las plataformas de networking. Supongamos, por ejemplo, que un usuario tiene distribuidos sus contactos según sus tipos, a través de diferentes plataformas, lo cual incide también en la existencia de diferentes estilos personales en la gestión de contactos. En estas condiciones, la “suma” de bases de datos puede estar conformando una estructura de la red profesional que no es, necesariamente, la que el propio usuario ha pretendido o desarrollado inicialmente.
MAPP: Así las cosas, tal parece que el diseño e implementación de las plataformas de networking no desconoce el potencial del manejo y gestión de las redes sociales, aunque no provee herramientas suficientes para que sean los propios usuarios quienes aprendan a analizar, a gestionar y a apropiarse de las redes que construyen. Por el contrario, esas plataformas parecen estar estructuradas para el beneficio de la gestión de redes se de en un único sentido: hacia los grupos inversores en las mismas.
El Software Social y los mercados de usuarios potenciales
¿A qué tipo de mercados está dirigido el software social?
MAPP: En primer lugar, es importante recordar que las herramientas que hoy se conocen como “software social” comenzaron siendo herramientas para comunicar a otros de un modo interactivo aquello que se quería comunicar. En este sentido, el contenido comercial que hoy tiene buena parte de ellas, no fue aquello que marcó su inicio ni su difusión. Aunque las plataformas de social networking constituyen un conjunto de herramientas en torno de las cuáles se han creado recientemente expectativas comerciales, su origen no es ese.
Hoy día, sin duda, buena parte de las herramientas llamadas de “software social” son utilizadas por emprendedores y trabajadores por cuenta propia, empresas de asesorías, agencias de empleo y buscadores de colaboraciones externas puntuales y de nuevos emprendimientos. En menor medida, aunque también podrían buscarse estadísticas al respecto, son utilizadas por investigadores que buscan estas plataformas para desarrollar estudios en conjunto con otros sin que la distancia física sea un obstáculo.
IMJ: Adicionalmente, y pese a las expectativas generadas y difundidas, las aplicaciones de networking (que generalmente se han denominado de modo confuso “redes sociales” en Internet), apenas han generado modelos de negocio viables. Son como grandes bases de datos en las que se intercambian tarjetas de visita, pero en las que la actividad con contenidos de valor suele ser escasa. De momento hay poco más. La publicidad tampoco parece estar arraigándose en este terreno, quizás por limitaciones de impacto. Pero esto es algo que podría cambiar en los próximos años.
MAPP: Parece ser que el factor “confianza” sigue siendo crucial en la construcción de emprendimientos conjuntos y las plataformas de networking no parecen plantear, hasta ahora, medios alternativos para alcanzar un nivel de confianza tal que posibilite el auge de negocios y otras iniciativas concertados por esta vía.
¿Se pierde en las relaciones humanas al convivir en un mundo virtual?
IMJ: No es eso lo que parece mostrar la investigación sobre redes personales y uso de Internet. Las relaciones más significativas para el individuo también suelen utilizar la comunicación mediada por ordenador y otros dispositivos digitales. Las personas con más relaciones cara a cara también suelen disponer de más contactos online. Parece que la pregunta debería ser más bien: ¿qué papel tienen las relaciones online en las redes personales de los individuos? Eso nos permite tener una visión de los cambios que conlleva la comunicación online, evitando una separación ingenua entre relaciones “reales” y “virtuales”.
¿Hay diferencias entre las distintas herramientas de software social en cuanto a su uso? ¿Funcionan igual foros, mensajería instantánea, blogs, wikis, redes sociales, compartir videos, etcétera?
MAPP: Para cada una de las herramientas de software social hay enorme cantidad de grupos de usuarios, sin embargo, con frecuencia usuarios y medios de comunicación suelen confundir wikis, con rooms, mensajería de texto, IRC o, incluso blogs. Cuando se separa, por ejemplo un “wiki” de una “edición colaborativa en tiempo real” se está olvidando que la característica principal de los wikis es, precisamente esa. De modo que no se trata de cosas distintas. Buen ejemplo de ello es la Wikipedia (una enciclopedia en formato de wiki), con una cantidad enorme de usuarios (lectores), editores, revisores y críticos en cada uno de los idiomas en que está disponible para los internautas. Por otro lado, de sobra es conocido la ingente cantidad de usuarios de blogs a nivel mundial, o de mensajería instantánea, chats (por IRC u otro tipo de salones), o de cualquiera de las otras herramientas mencionadas. No menciona su lista herramientas como Meneame, Delicious, Lastfm y otras que sirven, por ejemplo, para compartir gustos por libros, música, marcadores de páginas de internet y otros.
La práctica común es usar la frase “social networking” como una etiqueta bajo la cal se identifican cosas que no son necesariamente herramientas tecnológicas o sociales de modo exclusivo. Un buen ejemplo de ello es hablar de plataformas de networking y de “redes sociales” como sinónimos. Desde luego el que, recientemente, se haya “abierto” el panorama de las aplicaciones de graficación de redes sociales a la posibilidad de acceder a estas imágenes de modo interactivo, e integrado a plataformas que posibilitan una gestión más eficiente de la información, no quiere decir que una “red social” sea una herramienta tecnológica de modo exclusivo. De hecho, la red social es, quizás, la madre de todo software social, entendido este, como se ha dicho antes, como toda aplicación -no exclusivamente tecnológica o informática- que tiene por objetivo facilitar la construcción, modificación y fomento de interacciones entre los individuos, es decir las interacciones, los vínculos sociales. En este sentido, el software social tiene sentido en tanto que existe una red social y ésta puede representarse de muchos modos: con un dibujo sobre un papel, en el clásico estilo de los sociogramas de Moreno, o con los gráficos de Touchgraph o de Linkedin.
El software social y su impacto en la vida diaria
¿Cuál es el impacto del software social en los ámbitos educativo, empresarial o gubernamental?
MAPP: En cada uno de esos terrenos el impacto será mayor o menor en función del aprendizaje adquirido por los usuarios no sólo en el manejo mismo de la herramienta, sino en el análisis y gestión de redes sociales.
Si algo se ha podido evidenciar es que aunque básicamente las herramientas de social networking son las mismas a través de las distintas plataformas: localización de contactos e incorporación a una red personal, vinculación con marcadores de los contactos distribución de información publicitaria en función de preferencias de los usuarios y otras similares, ciertamente hay algunos ámbitos de la vida diaria en los cuales el impacto de estas puede diferir en función de la especialización de las funciones dispuestas de cara al usuario final.
Quizás el ejemplo más claro de esto tenga que ver con experiencias vinculadas al gobierno. Un buen ejemplo son las del Gobierno de Paraná (Brasil), vinculadas a la construcción de comunidades de expertos en docencia infantil. A través de una plataforma Web los expertos se comunican con sus pares y les asesoran en técnicas o contenidos educativos (puede consultarse el Portal Educacional y el Portal para Profesores ambos mantenidos por el Gobierno de Paraná). Sobre el impacto de este tipo de plataformas en el establecimiento de emprendimientos a través de los contactos localizados en ellas, está todo aún por explorarse, y verse.
Mirando hacia delante: tendencias del software social
MAPP: En términos llanos, la tendencia es, en términos tecnológicos, hacia la integración de las aplicaciones, al menos en la mayoría de los casos. Aunque espacios como Twitter, Facebook, LinkedIn, Hi5, MySpace y otros, obedezcan a intereses básicamente comerciales, hay una marcada tendencia por parte de los desarrolladores de software a ofrecer aplicaciones que permitan integrar estos servicios en un único espacio. Flock, un navegador que funciona a partir de Mozilla, sin lugar a duda nos muestra una clara tendencia en este sentido y, además, el reconocimiento de que cada vez es mucho más acusada la transversalidad en el uso de las plataformas de networking por parte de los usuarios.
Sin embargo, esta tendencia, lamentablemente, no puede extenderse por igual al ámbito comercial. En términos económicos y de gestión de empresa, la difusión de cualquiera de estas plataformas es lo que asegura su subsistencia, mucho más allá del uso que de estas hagan sus suscriptores. En ese sentido, parece que la tendencia es a que emerjan nuevas iniciativas de este tipo apuntándose a una suerte de efecto bandwagon que haría que con una buena iniciativa publicitaria una nueva plataforma de networking puede capturar un cúmulo de nuevos interesados.
IMJ: Pienso que estamos en una fase de experimentación. Las plataformas de networking están explorando sobre el uso de dinámicas sociales online para fines educativos, empresariales o políticos. En un corto espacio de tiempo los usuarios han ido experimentando con los nuevos medios, apropiándose de las herramientas y a veces realizando innovaciones que van más allá del diseño técnico de las mismas. Creo que a corto plazo las “redes sociales” online irán incorporando una visión más matizada de las relaciones, definiendo el modo de funcionamiento y perfilando, como se dice ahora, “el modelo de negocio”.
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